Antes de seguir contando peripecias vescerdéñicas necesito compartir un descubrimiento que me tiene fascinada: en diciembre y en Pamplona los coches se hielan. Yo creía que se trataba de una leyenda urbana, aunque, para estar prevenida, pregunté (ayer por la noche) qué debería hacerse en caso de helada.
- Rascarlo con una rascleta.
-¿Y de dónde saco yo una rascleta?
- Los coches tienen.
- El mío, no.
- ¡Bah!, no está helando mucho. Échale agua fría.
Esta mañana el pobrecillo clio era un carámbano. Después de montar a Joana en su silleta he dibujado media sonrisa prepotente: "leyenda urbana o no, soy previsora". Y he echado sobre la luna el contenido de un botellín de agua, que, por supuesto, inmediatamente se ha congelado sobre el hielo anterior.
Tres coches más adelante, un chico rasclaba y rasclaba y le he pedido su rascleta. A punto estaba de empezar a sudar (a 3 grados bajo cero) cuando otro ducho conductor me ha comentado con aires de superioridad (tipo 'mujer tenía que ser'): "si enciendes el aire de la luna, lo sacarás antes". En cualquier otra circunstancia, mi orgullo hubiera aullado de dolor, pero no si se trata de asuntos automovilísticos. Para agradecerle el consejo, me he mostrado tal y como me veía: patosa con el coche como un elefante en una cristalería.
- Me dijeron que una solución era echarle agua, pero no ¿verdad?
- ¿Le has echado agua? -(cara de compasión ante tanta ineptitud)
- ...
- El agua se congela en cuanto la echas.
- Ya me he dado cuenta.
El chico de la rascleta viene a recuperarla. Sólo he logrado limpiar un círculo delante del asiento del conductor. Será como conducir desde el fondo de un pozo.
Chico rascleta: - ¿Qué?
Hombre irónico-compasivo: - Aquí, esta mujer. Le ha echado agua.
Chico rascleta: - Ya.
Chica en apuros: Gracias.
Y me voy, lentamente.
Joana: - ¡Mònica, no estés triste, que ya vemos!
14 comentarios:
Vaya.....con una copiloto así cualquiera se atreve !!!!
Existen unos liquidos en spray contra el hielo maravillosos y algo más casero es el alcohol.
Gurb.
Yo no noto el frío. Es más, voy en esta época del año con bermudas y con camiseta de manga corta.
En Madrid era la rutina de cada día: rascar el cristal para poder llegar a la Universidad. El consejo de encender el coche antes es bueno: el hielo del cristal empieza a fundirse y una vez dentro la calefacción ya funciona.
Por otro lado, mi coche tenía rascleta, pero ya no sé dónde está.
es verdad! el coche en madrid amanece siempre helado!. Lo del alcohol es buen remedio también. Ánimo!
Qué suerte tener a Chico Rascleta y Hombre Irónico para solucionar los problemas. En el Medio Oriente tenemos al Presidente de Estados Unidos y un largo etcétera, pero no son tan efectivos. Claro, también nos falta el apunte de Joana.
Claro, Enric. Y además están Gurb y Marc y María que me dejan aquí sus consejos. Ramiro debe de parecerse más al presi de los usa: me mira desde argentina y dice ¿frío? exageras, el tiempo está estupendo.
Es que ya lo comentábamos en el skype... mi coche no está hecho para el hielo. La verdad es que se estrenó en una ruta por Andalucía en pleno agosto, hace ahora año y medio. Eso es lo que le quedó en mente, supongo...
Haz lo que debas pero, por favor, no me ralles el cristal!
Con que Argentina eh, Ramiro? ¡Qué suerte!
Besos a todos.
Somos gemelos de amanecer. Por suerte, no soy previsor. Rascleta, qué gran palabra.
Mo, se en mi ordenador se ha achicado la foto del quiosco de Malaquita que en verdad es de Piedra Santa. ¿Qué pasó?
Gurb, ¡el alcohol funciona! Gracias.
J., no te preocupes, en realidad no sirve de mucho ser previsora-inepta (y yo en coche pongo buena voluntad, pero pericia...)
Enric, ni idea. Si supiera cómo achicarla entraría en sus márgenes.
Sister, sister, tú me dejaste el coche; deberás asumir las consecuencias...
¡Epa! ¡Mi foto también ha encogido! ¿serán los efectos del frío en la blogosfera?
Ayer fui a por la furgo a las 7.30 de la mañana, aquí en Donosti, y también estaban los cristales helados. Mi solución -ni alcohol ni rascletas ni aire caliente ni tonterías-: no volveré a salir de casa antes de las once. .
Como extranjero al principio no entendía que era ese elemento raro que apareció en casa. Pensé que era un elemento de limpieza pues estaba en un cajón de la cocina. Además, pensé que rascleta era otra de las tantas palabras que se usan acá, pero, Mòmo, el sr. RAE no reconoce la rascleta, y vos sos la quinta autoridad citada por el sr. Google (http://www.google.es/search?hl=es&q=rascleta&btnG=Buscar+con+Google&meta=). En fin, habrá que ver si tiene otro usos más además del del parabrisas.
Nacho: una rascleta (o como se llame) pequeñita sirve para limpiar la mugre de la vitrocerámica. Estoy emocionada; nunca me habían llamado autoridad...
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