13/11/07

un regalo


Joana se detiene un momento antes de entrar en la escuela. El patio se ha cubierto de hojas secas que crujen a nuestro paso. Recoge una, grande, oscura, entera; camina un poco, la estoy esperando, hace frío. Se para y retrocede. Busca con ojos y manos. Vuelve. "Toma, mamá, otra para ti; no la tires: es para espantar lobos".

No la tiro. Ahora preside mi mesa en la biblioteca, por si aparece el lobo.

* No tengo cámara digital, así que tendréis que conformaros con esta imagen de otra hoja que se parece un poco a la mía, pero no es la mía.

7 comentarios:

ramiro dijo...

¿Y te explicó cómo utilizarla en caso de necesidad?
¿También detecta a los lobos disfrazados de cordero?
No sé por qué hago esta última pregunta. Es una hoja encontrada en el suelo. No fue comprada en una tienda especializada.

J. dijo...

pero ella no aceptó mi globo amrillo. Aquí lo tengo, atado a la pata de la cama. Lo miro.

mòmo dijo...

Ramiro, bobo, las de las tiendas no sirven. Sólo las del suelo, pero hay que saber encontrarlas, y Joana sabe.
J., ayer su globo era azul. Pensé que era el que le habías regalado tú.

Marc Roig Tió dijo...

Que tiemblen Mc Giver y su chicle.

[Esta historia me recuerda el chiste de:
- Mc Giver, ¡que viene un tanque!
- Tranquilo, tengo un chicle.]

Anónimo dijo...

He visto la hoja y la verdad es que es más bonita que la de la foto.
Y una cosa es cierta: desde que la tienes en tu mesa, no he visto ningún lobo en la biblioteca. Antes, tampoco. Pero, por si acaso, que no se te ocurra quitarla de allí.
Besos.

Ferran dijo...

Marc, no he pillado el chiste...

Bloody Marie dijo...

No sé porqué, Ferran, de ti no me sorprende. Simplemente es gracioso. No tiene más.

Pues a mí me recuerda a la técnica que utilizaban en "Tu a Boston y yo a California". Eso sí, menos ruidosa. El detalle es precioso, pero creo que Joana está empezando a burlarse de ti, jeje...