30/9/08

Gargantúa


Joana a un caracol. Cantando:
- Me gustas tanto, me gustas tanto, me gustas tanto que un día te comeré.

Mi entrenado olfato filólogo me avisa que esta es probablemente una variante de mi muy repetida hipérbole ¡Te quiero tanto que quiero comerte a besos! Tal vez sólo quiere mostrar su amor incondicional por los gasterópodos, pero creo detectar cierta ironía en su sentencia, como si tratase de camelar al animal antes de comérselo crudo.

* El de la imagen es el auténtico Gargantúa -no Joana- dibujado por Doré.

2 comentarios:

Ander Izagirre dijo...

Me recuerda a la letra de una jota obscena que me encanta:

"Me gustan tanto tus ojos...".

Y no pienso acabarla aquí.

Anónimo dijo...

Mòmo, me doblo de la risa con las historias de Joana. Y sí, me alegran la tarde siempre que las cuentas, ¡gracias!