- ¡Ay, mamá! ¡Tienes las manos muy frías!
- Sí, ya lo sé.
- Pues, ¿sabes?, si tienes las manos frías tocas a Nemo y ya tendrás las manos calientes.
- ¿En serio? Pero si es un bebé...
- ¡Pero es como una estufa, Nemo! Porque un día yo tenía las manos frías y lo toqué y luego... ¡Magia! Ya no tenía las manos frías. Es como una estufa muy caliente.
1 comentario:
Por la cara que pone Nemo, parece que la estufa está encendida. ¿Qué van a significar sino esas manitas así, como flamas encendidas?
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