20/10/08

pasé el examen


Desde debajo de mi silla sube un sollozo lastimero, capaz de conmover el ánimo de cualquier profano en el Arte y estudio del chantaje emocional en beneficio propio I: los hijos:
- Mi papááááá... Quiero a mi papáááá...

Pero yo soy estudiante aplicada y me sé sus trucos. Acabo de reñirla. No cuela, así que sigo conversando como si nada.
Al rato, claro, el sollozo termina.
- Mamá, ¿por qué no encontramos a mi papá?

La pregunta se repite con obstinada frecuencia, aunque supongo que es lógico que se dé cuenta de que su estructura familiar anda coja. Lo malo sería que ni lo notara.
- No lo sé, pero ya lo encontraremos. Ten paciencia.
- Pero, ¿y si no lo encontramos?
- Si no lo encontramos, pues seremos una madre y una hija la mar de felices, ¿te parece bien?
- Pero y si la mamá se va, ¿quién cuidará de la hija?
- Pues si la mamá no está la cuidarían los abuelos.
- Pero, ¿y si no hay ningún mayor para cuidarla?
- Hum. Si no hay ningún mayor... Bueno, supongo que entonces la hija tendría que pedir muy especialmente a la Virgen que cuidara de ella.
- Ah.
- Pero eso a ti no te va a pasar, ¿verdad?, porque tú tienes a tu mamá, que siempre cuida de ti, ¿no?
- ¡Sí! ¡Veo tus pies!
- Eso es buena señal.

* Aquí, información sobre el libro de Peter Reynolds que ilustra esta entrada.

7 comentarios:

ERT dijo...

Cuando vi el libro en bienvenidosalafiesta pensé en regalértelo. Pero luego me dije que es imposible que no te lo hayas regaladado ya...

mòmo dijo...

Es posible, hermano, es posible...

Ander Izagirre dijo...

Francis ya lo ha regalado alguna vez.

Andanhos dijo...

La verdad me parece ser el mejor camino. Pero, por supuesto, hay muchas formas de contarla.
¡Eres una madre estupenda!
Besos a las dos.

J. dijo...

Veo tus pies. Joana tiene el raro don de lo preciso.

Veo tus pies.

Mae Ortiz dijo...

Estuve presente en la escena y la traducción ha sido fiel (ji). Lo qué si se me había escapado es la frase en catalán de "ahí veo tus pies"...guau...
mae

Anónimo dijo...

¡Ey! Yo también estuve presente... y la transcripción NO ha sido fiel. No se trata de contradecirte, Mò, sino de irle un poco en contra a alguien más, con quien nunca puedo estar de acuerdo en nada. Y, sino, pregúntenle a Félix.